Miércoles de truco y esta vez con una técnica que utilizo habitualmente en mis cursos de repostería ya que me parece de lo más sencillo, rápido e higiénico. No es necesario entrar en contacto con el interior del huevo para obtener de manera limpia las claras por un lado y las yemas por otro. Además te aseguras también el que caigan trocitos de cáscara dentro de la clara o de la yema, pero de ser así y al ser la tapa de color oscuro, podemos retirar los trocitos de cáscara de huevo con mucha facilidad.