Cuando hacemos barbacoas en verano me encanta poner siempre algunas alitas de pollo previamente adobadas. A pesar de que es una parte del pollo que no tiene mucha carne, me resultan de lo más sabrosas y jugosas. Sin embargo cuando he probado en algunos restaurantes las alitas de pollo que supuestamente están hechas a la barbacoa, me han decepcionado muchas veces. Y fue probar estas alitas que hoy os traigo y no volver a pedirlas nunca más fuera de casa. Aunque nada tienen que ver con las alitas de pollo que hacemos en la barbacoa en verano, os aseguro que merece la pena hacerlas. A los niños les encantan y a nosotros creo que nos encantan más que a ellos :)
Si te gustan las alitas más doradas, no tienes más que dejarlas en el horno unos minutos más hasta que alcancen el punto que te guste a ti.