Adoro la fruta de estación como la sandía. Además de esperarla con ilusión durante todo el año, me resulta en general una fruta con más sabor y dulzor que las frutas que permanecen durante todo el año. Además este tipo de fruta llega cuando el calor empieza a asomar y no hay mejor momento entonces para refrescarse o para amenizar nuestra merienda que con un rico refresco hecho a base de frutas naturales.
La sandía además de ser una fruta muy refrescante, tiene un montón de propiedades beneficiosas para nuestra salud y encima tiene poquísimas calorías. Por todos esos motivos es una de las frutas que nunca faltan en nuestra nevera durante los meses de verano.
Puedes suprimir las hojas de menta si no te gustan mucho.