Me encanta esta receta porque no solo es ligera y muy saludable ya que no necesitamos a penas ninguna grasa para elaborarlos, si no que además se preparan en poco tiempo y puedes acompañarlos con verduras, patatas o un poco de arroz.
A mí particularmente me gusta añadirles a los huevos una vez cocinados, un chorrito de aceite de oliva, un poco de pimienta negra recién molida y una pizca de pimentón que puede ser dulce o picante.
A los niños les encanta que les haga estos huevos hechos al vapor porque los suelen comer cortados en trocitos y mezclados con arroz o con puré de patata. A los demás sin embargo nos gusta comerlos un poco menos hechos y poder mojar así el pan o las patatas en la yema. Así que como veis hoy os traigo un plato de lo más sencillito y apto para toda la familia.
Ajusta el tiempo de cocción de los huevos en función de cómo te gusten de cocinandos. Así resta o suma un minuto o dos a la cocción para obtener unos huevos con la clara y la yema completamente cocinadas o por el contrario consigue la yema líquida para disfrutar de ella acompañada de pan o patatas fritas.