Para esta sencilla receta coceremos brevemente la pulpa de calabaza, que luego servimos con una salsa agridulce de vino, miel, vinagre y ralladura de naranja. La calabaza agridulce se conserva en frío, y se sirve como entrante, acompañando quesos cremosos como el camembert o el reblochon.
Si quieres se puede envasar y esterilizar, al modo de las conservas caseras, para prolongar su duración.
Ingredientes, 4 personas
400 gr. pulpa de calabaza, en dados, 100 gr. vinagre de manzana, 200 gr. vino blanco afrutado, 120 gr. azúcar, 100 gr. miel, 30 gr. almendras peladas, ralladura de media naranja, sal, pimienta.
Elaboración
Corta la calabaza, pelada, en dados regulares, de 2 centímetros más o menos. Llena el vaso con 500 gr. de agua, calienta a temperatura varoma hasta que alcance dicha temperatura (unos 5-6 minutos a temperatura varoma, velocidad 1) y cuece los dados de calabaza en el recipiente varoma, 10-15 minutos a temperatura varoma, velocidad 2 (según dureza de la calabaza). Aparta y deja escurrir.
Tira el agua del vaso e introduce el vinagre, el vino, el azúcar, la miel un poco de sal y pimienta y la ralladura de naranja. Deja cocer 10 minutos a temperatura varoma, velocidad 1, sin el cubilete, para que evapore y reduzca bastante la salsa. Deja la ventana abierta, para que ventile la cocina, ya que el vinagre huele fuerte al cocer.
Mezcla en una fuente o ensaladera profunda la calabaza reservada con la salsa agridulce caliente. Remueve, adereza con las almendras fileteadas y deja enfriar a temperatura ambiente.
Consejos, degustación
Una vez preparada esta receta de calabaza agridulce, guarda en frío. Es mejor prepararla el día antes, para que los sabores maduren. Sirve de entrante, acompañando quesos o como aperitivo.
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